28/2/10

Drumming

Cuando, esporádicamente y parafraseando a Galadriel, digo que el mundo está cambiando, en realidad, y aunque haya algunos que se lo tomen a broma, lo digo bien en serio.

Hoy, durante el desayuno, al tomar los últimos tragos de mi café, vi, a un lado de la mesa, un periódico abierto por una página que contenía un sudoku. Ya sabéis vosotros que cuando empezó todo el boom de los sudokus, yo no hice nada más que ignorarlos, porque bien se sabe por estos lares que yo no me llevo muy bien con los números... que lo mío, si es que algo es mío, son las letras. Así que, en esa relación de evitarlos, jamás me propuse hacer uno... por lo que jamás hice ninguno. Pues ahí estaba yo, sentada y mirando el sudoku. Mirando fijamente los números. Mirando fijamente las líneas rectas que lo delimitaban. Y viendo qué podía poner dónde.

45 minutos después, no pude reprimir un pequeño grito de victoria, con el cual concluía mi primera (y quizás única... ahora mismo no puedo estar segura, pues quizás se me ha abierto otro nuevo mundo) experiencia [satisfactoria] con un sudoku.

Aquí lo dejo, pues.

23/2/10

Frasier

At a funeral:

Cousin: Yes… Gary was a totally health fanatical. A strict vegetarian. I used to play basketball with him every Sunday.

Frasier: Oh… So he was sedentary all week and then he was burning up the court on Sunday. That can be very stressing on the heart.

Aunt: No! He played at least four times a week. That is when he wasn’t at the gym working out.

Sister: Gary was in a phenomenal shape…

Aunt: He didn’t smoke. He never touched caffeine.

Cousin: You know he had less than 10% body fat on him?

Frasier: My goodness!! Has anybody checked to see if he is really dead?


22/2/10

Los recuerdos de la Holanda de mi infancia

Cuando era pequeña, pasaba casi todos los años un tiempo en Holanda, principalmente en verano. A veces unas semanas, a veces un mes. Los primeros años (cuando más pequeña era) iba con mi hermano y nos quedábamos en casa de mi abuela, en Vroomshoop. Luego, por circunstancias que no vienen a cuento, pasábamos el mes en casa de mi tía. Los últimos años ya iba yo sola a Holanda porque mi hermano tenía cosas mejores que hacer (entre otras, ir a trabajar). Cuáles fueron los mejores años... posiblemente, los primeros, cuando era una enana que iba en la parte de atrás de la bici con mi hermano y me cuidaba lo mejor que podía y mi abuela nos regalaba su amor todos y cada uno de los días en los que estábamos con ella. Pero recuerdos tengo de todas las etapas y son muchos.

- Hay unas cuántas cosas que recuerdo especialmente de los años en los pasábamos un tiempo con mi abuela. La primera, el olor de su jabón. Es de una marca típica de Holanda. Y cada vez que lo huelo me transporta a la casa de mi abuela, a ella. Es increíble cómo un olor puede quedarse grabado en nuestra memoria y luego llevarnos al pasado en un solo instante. La segunda son los vecinos. Algo así como unos granjeros con sus cientos de vacas y su propia leche. Mi abuela nos mandaba a mi hermano y a mi casi todas las mañanas a buscar nuestra propia jarra de leche. Realmente no tengo grabada en mi memoria la cara de quien nos daba la leche, pero sí ese momento... el de salir de casa de mi abuela e ir corriendo con mi hermano hasta nuestro premio. También los vecinos de al lado, con dos hijos. Una chica de la edad de mi hermano y un chico de mi edad. Durante esos años siempre pensé que esa chica sería la primera novia de mi hermano, jijiji. La madre de ellos siempre nos regalaba chocolatinas (los famosos paquetitos de Smarties), y con la chica, sobre todo, íbamos a dar paseos con la bici. Mi hermano pedaleando y yo detrás. Pasábamos a menudo por el lago que había con algunos cuantos patos y nos dedicábamos a tirarles pan. Y un pequeño puente que pasábamos por debajo, con su debida cuesta para coger velocidad... También en casa de mi abuela había dos inmuebles que tenían especial relevancia: 1) el sillón de la mejor amiga de mi abuela, considerada como una segunda madre por la familia, que siempre estuvo ahí (cuenta mi madre que si no hubiese sido por ella, uno de mis tíos no habría pasado de sus primeras semanas) para todos y cada uno de los retoños de mi abuela, y por supuesto, para su amiga. Pasaba días en casa de mi abuela, siempre sentada en su sillón. Siempre ahí. 2) el mueble con cajones que había en la habitación que yo dormía. Tiene todavía impregnado el olor de la casa de mi abuela. Mi tía aún lo conserva.

- A lo largo de esos años, una de esas veces en las que pasábamos unos cuántos días en casa de mi otra tía, que vivía en Vasse, mi hermano tuvo la santa paciencia de enseñarme a montar en bici. Me acuerdo del parque en el que estábamos. Él, al final del camino de tierra marrón, negra y húmeda, esperándome y gritándome: ¡¡venga!! ¡¡pedalea!! ¡¡recto!!

- También íbamos de cámping, con la caravana de mis tíos. Los primeros años, íbamos a cámpings más discretos, más íntimos. Me acuerdo de uno especialmente por el perro que tenía otra gente que estaba por ahí. ¡¡Estaba loco el condenado!! También solía ocurrir que mi tío se hacía amigo de algún granjero que había cerca y alguna que otra vez coincidiamos con el nacimiento de alguna vaquilla. Me acuerdo de una vez que tuvo que ayudar porque la criatura no salía... y puso una cuerda alrededor de las pezuñas para estirar y ayudarla a salir. Qué atrocidad, ver eso a unos jovencísimos años. Se te queda grabado. También había otra pequeña que hacía poco había nacido y tenía problemas de contención. Por dios, ¡cada dos por tres se hacía pis! Y bueno, largos paseos, nos hacíamos amigos de los caballos, etc, etc. Los siguientes cámpings ya fueron algo más masificado e incluso había gente de nuestra edad, piscina, baños y una especie de sitio de picnic. Así que ahí pasábamos una semana (o dos), con mis tíos, haciendo amigos y el chorra por el ancho bosque que nos rodeaba.

- El hecho de que mi hermano y yo pasáramos cada año un tiempo en Holanda suponía para la familia holandesa una especie de revelación. Lo mejor era que casi cada uno de mis tíos y tías nos quería llevar a algún sitio diferente, por lo que siempre acabábamos con la visita a algún parque de atracciones, a algún zoo o vete tú a saber qué. Hubo una vez en la que, al salir de algún tipo de sitio como estos, con la bici, se me cruzó mi propio tío (!!) sin querer, las ruedas de las bicis chocaron, y yo caí de lado. No se me ocurrió nada mejor que poner el brazo plenamente recto para frenar la caída. Quizás me frené, si. Pero por el camino me partí el brazo. Dios mío. No sé si es real o no (quizás estaba convaleciente y lo que voy a relatar aquí es una invención completamente mía), pero creo recordar que yo iba en la parte de atrás de alguna bici y acabamos en algún médico que tiene la consulta en su propia casa, en medio de alguna carretera. Yo debía de estar llorando como una condenada (o no, yo que sé). La cuestión es que cuando fuimos a un centro médico (si es que fuimos... porque a lo mejor me lo puso ese mismo médico, no estoy segura) me pusieron 3 capas de yeso. Cuando llegué a Mallorca (que por cierto, pensaba que el brazo me iba a explotar por la presión en el avión) y me llevaron de nuevo al médico, me pusieron 2 capas más de yeso. ¿A santo de qué? En fin, así que ahí estaba yo. En pleno verano. Con el brazo enyesado. Durante un mes. Sobra decir que sí, me rasqué por dentro con una vara de yo que sé qué y sí, se me quedó el taponcito dentro. ¿A quién no le ha pasado nunca eso? xDDD Ya que estoy por estos relatos, voy a mencionar la curiosa anécdota de que, las dos únicas veces que me he roto algo ha sido en Holanda. La otra vez, fue en casa mis tíos (con los que estoy pasando ahora este mes). Justo el día antes de volver. Estábamos en la parte de atrás de la casa. Yo jugando con mi tío y no sé qué puñetas pasó, que me caí no sé cómo y me rompí algún hueso del pie izquierdo. No podía apoyarlo. Así que mi tía me llevó a un centro médico... Y ahí estábamos esperando, yo sentada en una silla de ruedas, con mi pie izquierdo descalzo y mi pie derecho con el zapato. Pues no tuvo mi tía la santa ocurrencia de hacer la gracia diciéndome: "¡Ahora sólo falta que este también se te rompa!", haciendo referencia a mi pie bueno pero sacudiéndome mi pie malo. Joder cómo chillé... xDDD En fin, me enyesaron la pierna hasta debajo de la rodilla (ya podría haber sido hasta por encima del talón...), también en pleno verano y me dijeron que tenía que llevarlo 3 semanas. Al día siguiente, en el avión, volví a pensar que me explotaría la pierna. A la semana ya estaba apoyando el pie. Y me acuerdo que, durante esos días, comí mucho melón.

- En la antigua casa de mis tíos, no había piscina. Bueno, qué puñetas, en esta tampoco (la verdad es que no he visto muchas casas con piscina). Me acuerdo que, cuando mi hermano y yo teníamos mucha calor, mi tía sacaba un cubo rojo grande, metíamos los pies dentro y sacaba la manguera. Qué tiempos aquellos. ¡Cuando podía meterme en un cubo rojo!

- Mi tía, por aquel entonces, trabajaba en su propia oficina (de su empresa), que estaba a cinco minutos andando de su casa y a uno y medio en bici. Había días que mi hermano y yo nos pasábamos por ahí. No sé si a tomar café, si a dar la lata a mi tía, o porque nos gustaba el perro del compañero de mi tía y preferíamos jugar con él a estar solos en casa. Baroon. se llamaba. O Baron. No sé. Pero qué perro más alegre y más dicharachero. En la parte de atrás de la oficina nos pasábamos los minutos corriendo delante y detrás del perro. Tirándole pelotas de tennis, etc. Me acuerdo, ahora volviendo al interior de la oficina y al compañero de mi tía, que quise hacer una gracieta y me salió el tiro por la culata (quizás tenía algún tipo de enamoramiento con el hombre en cuestión). No voy a decir la broma, porque no tiene sentido traducirla. Pero sí me hace gracia que esa anécdota, y no otras, se me haya quedado especialmente grabada. ¡Ay, la vergüenza, cómo marca! xD

- Ya en la nueva casa, los años en los que todavía venía con mi hermano, éste me obligaba a jugar al fútbol con él. Siempre se ríe cuando lo recuerda. A mí en verdad me hacía ilusión que me lo pidiera. Pero shhh, no se lo digáis. Y también fue durante este tiempo en el que, cada vez que yo le pedía hacer algo y él me decía no, siempre le contestaba con un "Niño aburrido". A día de hoy, todavía se lo suelto de vez en cuando... xDDD

- Una cosa. Todo jovencito-adolescente que viva con bosques al lado desarrolla la imperiosa necesidad de montar alguna cabaña. Lo hicimos en Mallorca, y lo hicimos aquí también. Se nos podía ver a mi hermano y a mí, madera arriba, madera abajo, para crear algún sitio en el que pasar el tiempo. Incluso hicimos una inauguración y comimos toda la familia ahí. ¡¡Macarrones!! Después de eso, no sé si la usamos mucho más. Hoy ya no existe... xD

Realmente pasé buenos tiempos durante mi infancia, por este país. Lo que pasa que la cosa cambió cuando mi hermano dejó de venir conmigo y yo me pasaba un mes entero aquí, bastante sola (cuando creía que tenía mucho más que hacer en Mallorca... porque por aquel entonces jugaba al tenis y tenía a mis amigos en esas pistas!). Aparte, también era la etapa de la adolescencia y las cosas son muy diferentes. Cuando se es niño no te importa tanto que tus tíos/as quieran hacer esto y aquello contigo. Cuando eres adolescente, las cosas cambian mucho. Hay ciertas preguntas que molestan. Ciertas cosas que no quieres hacer. Y ciertas cosas que piensas y no puedes exteriorizar.

Echo de menos muchas cosas de aquellos tiempos. A mi abuela, siempre. La inocencia. Las ganas que tenía siempre de coger la bici y recorrerme 10 km para cortarme el pelo en la peluquería de uno de mis tíos. A mi hermano, también. Las antiguas casas en las que pasé el tiempo. En fin... Esto es una pequeña parte de lo que viví cuando era una mocosa. Parte de lo que es y vivió mi madre. Tendré que agradecer al país por todos esos momentos que me brindó. Y por la leche que bebí.

20/2/10

Relato nº 4

Nací en la nada y de la nada. Aunque técnicamente eso sea imposible. Quiero decir, todo nace a partir de algo, pero quizás yo fuera la excepción. O tan solo una manera figurada de hablar. Pero de la nada existí, y en la nada estaba. Aunque no sabría cómo explicar lo que es la nada. Quizás un burdo intento sería el decir que no tenía nociones ni de espacio ni de tiempo. Ni siquiera de mis propios espacio y tiempo. Y como no tenía aspiración ninguna (de momento), me limité a existir.

Durante mucho, y realmente quiero decir MUCHO tiempo, llevé una existencia solitaria y feliz. Era feliz en mi propia nada y más bien hacía poca cosa. Simplemente era. No hacía nada más. No había pensamiento. No había dolor. No había diversión. Nada. Parecía algo concebido en un arrebato de inspiración que se había estancado al pasar del primer párrafo. Como la idea latente de una historia que no sabe cómo evolucionar. Pero disimuladamente, y sin que yo fuera consciente de ello, de forma silenciosa y discreta, un cambio empezaba a tomar forma en mi existencia.

Así que, ahí seguía yo. Todavía sin nada que hacer. Sin nada que ver. Esperando a que todo tomara su curso natural. Yo y mi existencia, alejados de todo lo demás. No sé cuánto tiempo más pasó, porque probablemente mi percepción del tiempo sea errónea, pero de repente, empecé a tener forma y fin. Por forma me refiero a un cuerpo, y por fin, a una meta. Claro que, a ciencia cierta, no sabía qué tenía por misión ni cómo era mi cuerpo. Al no saber qué ni cómo era exactamente mi cuerpo, mucho me temía que no haría aquello para lo que había empezado a existir.

Mientras algo decidía, muy lentamente, mi propia forma, yo seguía en mi propia nada, sin mucho que pensar, excepto en qué clase de ser/ente terminaría por convertirme y de qué forma se me revelaría mi misión. ¿Sería una luz? ¿Un mensaje divino? ¿Algo o alguien diciéndome algo así como "MUÉRETE"? Porque bien podría ser ese mi único y exclusivo fin. Todo lo que nace, muere. Y hasta que no llega a ese punto, todo lo demás es evolución. Si yo ya había empezado el proceso de mi propia evolución, ¿sería, pues, la muerte mi meta? ¿O tendría algo más que implicar en el curso de las cosas? Algo así como crear vida nueva que implique grandes cambios... Y si era, entonces, solo la muerte mi razón de existir, ¿qué clase de muerte me esperaba?

Me encontraba de repente con tal actividad reflexiva, que me sentí exhausto y tembloroso, así que, por el momento, dejé de hacerme preguntas y simplemente me quedé esperando... Esperando a que algo cambiara.

Pasó demasiado tiempo. Eternidades, se podría decir, sin ningún tipo de exageración. Mi forma todavía no estaba completamente definida y tenía ciertas dudas sobre mi finalidad. Intentaba no pensar en ello, pues me dejaba sin fuerzas y sin energía para ser simplemente.

En algún punto de este tiempo infinito, hubo un inciso que provocó un desdoblamiento en el plano espacio-temporal y pude ver lo que bien podría interpretar como mi futuro. Vi parte de mi propia nada sumida en una lluvia de gas y polvo, desprendiendo infinidad de colores. No me preguntéis por qué supe que veía lo que veía. Es ese tipo de cosas que, simplemente, y sin explicación alguna, se saben. Así pues, después de esa perturbadora experiencia y claro mensaje a mi existencia, cogí lo que había empezado a ser mi cuerpo y lo llené de energía. Me había cansado de esperar, así que decidí desafiar al algo que me había creado y hacer lo que él no era capaz. Cogí aire una vez. Y dos. Y tres... Y me llené de luz.

Ahí estaba yo, pues. Un núcleo, una fuerza, rodeada por una luz cegadora. No a mí mismo, porque provenía de mi propio cuerpo, pero sí para los ojos cercanos que se atrevieran a mirarme. Mi cuerpo se había convertido en un algo masivo y pesado, que generaba ondas de energías por doquier. Me sentía pletórico. Realmente, no sabía si había sido yo el que me había otorgado mi propio cuerpo (muy caluroso, por cierto) o si en realidad, todo estaba ya escrito y así es como debía pasar, antes o después en la inmensidad temporal, y mi insistencia e impaciencia sólo había servido para acelerar el curso de las cosas. Fuera como fuese, me sentía lleno de vida y estaba preparado para el siguiente paso... pero de momento, y precavido como era, me paré a disfrutar de mis líneas irregulares, de mi propia luz, y de la inmensa grandeza de mi cuerpo, rodeado por la nada.

Volví a esperar. Pero esta vez, todas las eternidades juntas. Al principio, me pareció normal. Había pasado mucho tiempo hasta que me otorgué (u otorgaron) una forma, así que tendría que ser realmente paciente hasta que ocurriera otro cambio. Los primeros tiempos (los más cortos, pero muy parecidos a lo que se entiende por millones de años) disfrutaba de lo que era. Cada nuevo ciclo me parecía igual de interesante que el anterior. Las pequeñas cosquillas de mi propia existencia me sacaron de la continua monotonía de ser lo que era. No tenía dudas existenciales, porque la novedad de mi recién (y ya tan lejano) adquirido cuerpo llenaba todos mis pensamientos. Pero los últimos tiempos, fui consciente de todas y cada una de las partes de mi núcleo, qué lo formaba y cómo reaccionaban unas partes con otras... Después de comprender absolutamente hasta la última fibra de mi ser y de mi existencia (pero aún no mi misión), se me acabó la expectativa del nuevo ciclo. Me cansé de ser paciente. De esperar al cambio. Quizás no estaba destinado a él. Quizás mi vida se limitaba a ser simplemente lo que era y permanecer así por los siglos, milenios y eternidades a las que podía estar sujeto. Quizás no había nada más para mi. Y creedme si os digo que fui paciente y benevolente con la nada que me creó. Ni siquiera el mero hecho de haber visto, por gracia y obra de lo que fuera, mi posible futuro, suponía ya alguna esperanza para mi. Había pasado exageradamente tanto tiempo, que ya ni recordaba la explosión de colores que vi envolverme en la visión.

Digamos, entonces, que perdí la ilusión de ser. Y un día, dejé de crear energía. Algo en mi interior empezó a destabilizarse. Notaba la desintegración de unas partes y la fusión de otras. El cambio estaba teniendo lugar, pero yo ya no estaba. Me había separado de mi cuerpo, el cual había acabado aborreciendo, y me había resguardado en el propio núcleo, en la parte más interior que encontrara, para ser meramente un espectador más. No iba a tomar parte de nada de lo que ya pudiera ocurrir. No, ya no. Mi cuerpo asumiría lo que estaba por llegar.

Lo vi caer. Lo vi levantarse. Lo vi envolverse de luces y más luces. Intensos calores y pequeñas explosiones que desprendían de sí mismo partículas a la nada. En realidad, era todo un espectáculo. Yo había estado esperando millones de eternidades a que él viniera. Otras más a que él cambiara. Ahora que me había rendido, parecía que se regocijaba en su propio estallido de vida. ¡Ah! Pero qué equivocado estaba. Mi propio cuerpo había entendido mi inexistencialismo y había decidido, como yo, llegar a su fin. Nos esperamos el horror. Pensé, por un momento, en que quizás hubiera sido mejor el no haber inspirado y llenarme de luz... y así no haber creado mi cuerpo y evitar, ahora, lo que estaba por llegar. Pero era demasiado tarde. Y no tenía sentido una existencia insulsa y parada.

De repente, todo se llenó de una luz intensa y provocadora. Pequeñas explosiones ocurrían a lo largo y ancho de mi/el cuerpo. Yo lo vi. Primero eran discretas. Pero poco a poco (o también muy deprisa, pues la percepción del tiempo es absolutamente relativa), las explosiones empezaron a ser más agresivas. Toda la energía que había acumulado a lo largo de toda mi existencia se me fue escapando en cada una de ellas, hasta llegar al punto en el que la Nada se convirtió en una totalidad de luz, polvo y gas.

"Esta es mi meta, pues. Esta es mi muerte", dije. "Soy una supernova", comprendí, resignado pero también feliz, al fin.

Y mi propio brillo y yo nos fuimos apagando poco a poco..., hasta desaparecer completamente. En un instante.

19/2/10

Curiosidades y cosas que se aprenden de Holanda. Vol 3.

Ahí van más cositas:

- Cuando uno aquí tiene su cumpleaños, recibe las indicadas felicitaciones de su familia. Postales por doquier. Y si lo consigue, puede llevar un día de lo más normal. Si se realiza algo así como el tan archiconocido "venid a tomar un café con tarta", tú, cumpleañero, puedes sobrevivir al hecho de que tengas que besar 3 veces a cada persona que venga y te felicite. Vale, hasta ahí se puede entender, pues es bastante usual. Pero en Holanda es de educación (y tradición) felicitar, por ejemplo, a tu madre por TU cumpleaños. A tu hermano por TU cumpleaños. A tu padre por TU cumpleaños. Incluso si te ha tocado estar en una fiesta (o reunión de café) de este tipo en la cual realmente no eres familiar del cumpleañero, pero quizás amigo del primo, también te dan las felicidades por el cumpleaños de él/ella. ¿No os parece admirable? Cada vez que llaman a mi casa por el cumpleaños de mi madre y contesto yo, me felicitan a mi también. Alguna vez incluso me dijeron que felicitara a mi padre por el cumpleaños de mi madre. ¡¡!!

- Aquí en Holanda existe el movimiento gastronómico conocido como "comer de la pared". Esto consiste en nada más y nada menos que algo así como un dispensador gigante de comida caliente en una pared. A lo mejor 3-4 metros de ancho por 2 de alto. Lleno de algo así como minihornos cuadriculados los cuales ofrecen suculentas salchichas, croquetas, patatas fritas, y un sinfín de cosas (comida rápida como se puede ver), a cambio de monedas. Hay algunos que están situados directamente en una pared de calle (detrás hay alguien haciendo las salchichas, claro...) y otros que están dentro de mini-bar-snack, por llamarlo de alguna manera. Y las salchichas realmente no son las salchichas que nosotros los españoles conocemos. No. Aquí son frikandellen.

- El otro día fui a una tienda, algo así como Eroski, pero versión completamente holandesa (miles de especias, su sección de jardinería, una parte de panadería inmensa que desprende olores maravillosos, etc, etc), a comprar dos kg de masa de harina específica para hacer pan. En medio de la tienda, había una máquina de hacer café, leche y azúcar, todo gratis, y un banco. WTF. En Groeningen, en una tienda de ropa cualquiera, había también un rinconcito apartado con una máquina de café y unos asientos. En tiendas de ropa lo había visto alguna que otra vez... pero en una tienda de consumibles... !! Pero qué grande es este país, coño. ¿Os imagináis en medio del Eroski una Nespresso y bancos en los que sentarse y tomarse tranquilamente el café, gratis? No, ¿verdad? En fin.

- Los holandeses son puntuales. Es más, de tan puntuales que son, a veces incluso llegan 20 minutos antes. Pero es un tema de poca broma aquí. Una de las primeras veces que iba a jugar al tenis, mi tía dijo: "Tenemos que estar a las 08:40 en el coche. Pero a las 08:40 hora holandesa, no española." Así que, advertidos quedáis. Tanto para los puntuales como para los que no lo son. Desde que estoy aquí, jamás he llegado a ningún sitio tarde. Jamás.

- Dato informativo y curioso, para que veáis cómo estaban las cosas y cómo están ahora. El otro día le pregunté, por simple curiosidad, a mi tía, cuánto había pagado por la casa. Doy por hecho que más o menos tenéis una idea hecha de las inmensidades de la casa y del terreno que tiene alrededor, gracias a las fotos del feisbuk. Bien, pues tranquilamente dijo: "Unos 150 mil€". Voy a arriesgarme y decir que esto fue hace unos 11-14 años. Ahora, en el mercado en el que vivimos, esto debe de estar valorado en los 500mil€. Vale, sí. Tuvieron que hacer reformas y demás... Pero joder. Yo que sé cuántos m2 debe de haber aquí de terreno. Que en su día costara eso, ¡madre mía! Y lo que vale ahora, ¡madre mía! El otro día, cuando íbamos a cenar a Dedemsvaart, a casa de mi tío, antes tuvimos que hacer un parada para recoger unos libros de la biblioteca de Hardenberg (y la cual, por cierto, y dicho sea de paso, tiene un cementerio al lado ladito). Bien, pues al salir de ese pueblo y tirar hacia casa de mis tíos vi unas casas adosadas de las cuales me enamoré... Cada vez que me pongo a mirar casas, siempre me digo, dentro de mis propias ensoñaciones, que me gustaría tener una individual, no adosada... pero por dios que no me importaría un carajo esa condición con esas casas. Y no son casas excesivamente llamativas, ni tienen algo extremadamente especial. Es la distribución de las plantas de la casa (se entiende que no me refiero a plantas vegetales, sino plantas como diferentes pisos de la casa) ... ¡¡y los ventanales!! La disposición de los ventanales, de los grandes del salón y cocina, y otros a lo largo de las escaleras y habitaciones, que visto desde fuera es la leche... ¡¡Haaah, estos holandeses bien saben lo que hacen!!

Y ahora... he estado pensando en hacer un post sobre mis recuerdos de la versión de Holanda de mi infancia, plagada de cámpings, la oficina de mi tía, la jarra de leche que íbamos a buscar por la mañana, cuando pasábamos todavía las vacaciones en casa de mi abuela... Así que, al que le interese, que esté atento. Me quedan pocos días ya por aquí, espero volver al blog con unas cuantas curiosidades más... y os puedo decir, así, en plan paréntesis pero sin serlo, que el cursillo de vidrio-fusión ha estado genial, y que antes o después, cuando estén listas las creaciones (la fusión lleva 24h, así que nos tienen que avisar), subiré las fotos correspondientes y una explicación de lo que he aprendido. Y antes de irme, os dejo un bonus track de la creatividad de este país (pero sin imagen).

Bonus track: Volvíamos hoy a casa, después del curso sobre la fusión de vidrio, cuando nos tragamos un semáforo en rojo. Yo, como siempre, mirando de forma obsesiva compulsiva todas y cada una de las casas (bueno, bueno... las casas que he visto hasta ahora son nada al lado de las maravillas que he visto hoy!!!), me fijo de repente en un árbol que está a la entrada de una casa. Es un tronco de unos 4 metros. Digamos que hasta los 3 metros, es un tronco normal y corriente (el árbol no tiene ramas, está completamente podado). Todo lo que hay después, son figuras talladas en la propia madera del árbol. Increible. Búhos, pájaros. Una cola de diablo y pequeñas puertecitas. Es una pena que no tenga una foto (iba en el coche, estaba oscureciendo, -3º para sacar las manos por la ventana, etc, etc). Pero de verdad, esta gente sabe lo que hace. ¡Imaginaos! Tienes el nacimiento y desarrollo de un árbol como tronco que le toca ser, y en lo que tendría que ser la copa con sus ramas y sus hojas, hay talladas aves. WTF.

PD: Mi árbol (el de vidrio) ya está acabado. Estoy esperando al amigo Lorenzo para poderle hacer una foto a contraluz. ¡¡Y qué bunicooooo que es!!

17/2/10

Frasier

Frasier: What are you doing?
Niles: Nothing! ... Oh, for goodness sake, Frasier! I'm a happily married man! Marice means the world to me! Just the other day I kissed her for no reason what so ever!

16/2/10

El Hombre Duplicado

"[...]Para el relator, o narrador, en la más que probable hipótesis de preferir una figura beneficiada con el sello de la aprobación académica, lo más fácil, una vez que se ha llegado a este punto, sería escribir que el recorrido del profesor de Historia a través de la ciudad, y hasta entrar en casa, no tuvo historia. Como una máquina manipuladora del tiempo, sobre todo en el caso de que el escrúpulo profesional no se haya permitido la invención de una algazara callejera o de un accidente de tráfico con la única finalidad de llenar los vacíos de la intriga, esas tres palabras, No Tuvo Historia, se emplean cuando hay urgencia de pasar al episodio siguiente o cuando, por ejemplo, no se sabe muy bien qué hacer con los pensamientos que el personaje está teniendo por su propia cuenta, y más si no tienen relación con las circunstancias vivenciales en cuyo cuadro supuestamente se determina y actúa. Ahora bien, en esta situación, precisamente, se encontraba el profesor y novel amador de vídeos Tertuliano Máximo Afonso mientras iba conduciendo su coche. Es verdad que pensaba, y mucho, y con intensidad, pero sus pensamientos eran hasta tal extremo ajenos a lo que en las últimas veinticuatro horas había estado viviendo, que si decidiésemos tomarlos en consideración y los trasladáramos a este relato, la historia que nos habíamos propuesto contar tendría que ser inevitablemente sustituida por otra. Es cierto que podría valer la pena, mejor dicho, dado que conocemos todo sobre los pensamientos de Tertuliano Máximo Afonso, sabemos que valdría la pena, pero eso representaría aceptar como baldíos y nulos los duros esfuerzos hasta ahora acometidos, estas casi sesenta compactas y trabajosas páginas ya vencidas, y volver al principio, a la irónica e insolente primera hoja, desaprovechando todo un honesto trabajo realizado para asumir los riesgos de una aventura, no sólo nueva y diferente, sino también altamente peligrosa, que, no tengamos dudas, a tanto los pensamientos de Tertuliano Máximo Afonso nos arrastrarían. Quedémonos por tanto con este pájaro en la mano en vez de con la decepción de ver volar a dos. Aparte de eso, no queda tiempo para más. Tertuliano Máximo Afonso ha estacionado el coche[...]."

O por qué José Saramago es Premio Nobel de Literatura.

15/2/10

7. Matt Saracen, Spider y Life

Haciendo una limpieza relativa en mi fuente seriéfila, me he dado cuenta de unas cuantas cosas:

1. Nunca he hablado de Mad Men en el blog. Qué falta la mía. Quizás no lo he hecho porque, a pesar de ser una gran serie (genial ambientada, interpretada y con muy buen guión), no me siento realmente identificada con ella. Como dije a Teresa, es el tipo de serie que le gusta a ella. Pero que le gusta de verdad. Disfruta de esa época. De esas copas en el trabajo, con los cigarros... Y las formas de Humphrey Bogart que pululan por doquier. A mi me gusta la serie. No lo voy a negar. También me gustó Los Soprano, pero siempre dije que nunca fue una serie realmente mía. No voy a dejar de verla. No después de ese final de segunda temporada con el que me deleitaron hace algún tiempo. No después de demostrar que es uno de los mejores dramas que hay en televisión en la actualidad. Pero ya sabéis... desde un sitio un tanto más neutral y quizás, más distanciado.

2. Echo mucho de menos Life. Echo de menos las manzanas de Crews. Sus cintas sobre zen. El coche agujereado que conducía. Sus batallas verbales con Reese. Echo de menos al novio de Reese. Incluso echo de menos a Olivia (aunque el mismo cuerpo pero no la misma mente se pasea por Mad Men). No sé por qué pensé que Lie To Me ejercería sobre mí como una especie de antídoto ante el dolor por la ausencia de Reese y Crews. Ya sé que son dos series que no tienen nada que ver. Pero pensé que podría servir como alternativa. Me quise agarrar a la estúpida idea de que Lightman y Foster podrían ser un buen método de distracción. No quiero quitar méritos al amigo Tim Roth (jamás osaría), pero desde luego Life era una serie bastante superior, más dinámica y mejor formada que la del detector humano de mentiras. Maldigo a la NBC por cancelarla. Y me alegro de que Heroes siga siendo la misma mierda que en realidad fue siempre (cuán ciegos estuvimos todos durante la primera temporada) y que estén a puntito a puntito de cancelarla.

3. Hablando de dejar de ver series (episodio 6 de la 3ra en Héroes. Episodio 8 de la 4ta en Prison Break), me he propuesto acabar con la tontería de: a) Private Practice. La verdad es que Addison Montgomery es un personaje de los pies a la cabeza (y Kate Walsh es endiabladamente guapa... creo que si fuese lesbiana estaría totalmente enamorada de ella), pero el resto de personajes ya me resultan insulsos (desde que se fue el casado [que pasea su cuerpo entre jóvenes con las que pasar la noche y curarse del divorcio en Cougar Town, la nueva serie de Courteney Cox, que sí, también estoy viendo] y crearan esa situación odiosa para Violet, nada es lo que era... bueno, en realidad, nunca fue nada)... Como mucho veré hasta el crossover que se marcaron con Anatomía de Grey (ah, vuelves a estar en la estela de lo que un día fuiste!) en el que Sloan se vuelve a meter entre las sábanas de Montgomery, y luego... dejaré de perder mi tiempo. B) Gossip Girl. Lo siento por Chuck Bass (!!) y Blair Waildorf, pero no quiero tener que aguantar 30 minutos del resto de personajes estúpidos que pululan por la serie (empezando por la insufrible Serena) para sólo ver 8 minutos de interacción entre los verdaderos reyes de la serie. Sé que no tiene sentido pedir un spin-off para estos dos, porque entonces perderían todo su encanto, pero no aguanto más. Y la curiosidad, en este caso, no me puede más. Me alegro de haber sido testigo del cambio del amigo Chuck, pero el odio que profeso a Serena Van Der Woodsen es infinitamente y desproporcionalmente mayor a todo lo demás. Y no. No voy a dejar de ver The Vampire Diaries. Al menos no de momento. ¿Por qué? Porque quiero que me sorprendan. Stefan cada día me gusta más. Elena tiene dos dedos de frente (parece mentira). Y tengo fe de que en algún momento aparezca un vampiro realmente cautivador.

4. Cuando Canal+, en su momento, emitió Frasier, siempre quise verla. Pero no tenía la ocasión. Llevo detrás de ella bastante tiempo, y por fin estoy empezando a conseguirla. Siempre me llamó la atención la serie sobre el psiquiatra con un programa de radio. Y cada vez que podía ver algún que otro capítulo suelto, el padre y sus salidas me parecían lo mejor del episodio. Con el permiso de Niles, claro. Ahora, por fin, estoy a esto (!) de conseguir las once temporadas que tuvo la serie y disfrutar como una enana de un poco de humor sobre psiquiatras que entienden a todos menos a ellos mismos. Qué ganas le tenía a esta serie... Desde siempre. ¡Y ya está aquí!

5. Bones. O Brennan y Booth. O Booth y Brennan. Creo que no hay más motivo para justificar el que también, por fin, haya conseguido la serie. Y también, le tengo unas ganas... que ahora mismo me falta tiempo. Más que nada porque no quiero pasarme el día pegada a la pantalla... ¡Pero se me acumulan tantas cosas! Ay, por fin, y a pesar de saber las resoluciones de según qué tramas y, también, saber que sólo fue un sueño, quiero ver el por qué, el cómo y... estaré ahí para cuando el momento llegue.

6. La segunda temporada de Friday Night Lights ha sido más humana y menos deportiva. Algunos dicen que es la temporada más floja (los que han visto las 4). Probablemente, así sea. Pero quizás ha sido necesaria para comprender a según qué personajes y llevarles hasta dónde han llegado. Sí que es cierto que he echado de menos esos partidos frenéticos ganados en el último momento (como diría mi padre: ¿Pero quién se cree eso? Pues el fiel espectador carente de prejuicios, xD)... y a Matt con su "Blue 80!!! Blue 80!!! ... READY... HUT, HUT!!!!". Pero hemos visto cómo los Taylor superaban una crisis. Cómo Julie, todo sea dicho de paso, se ha convertido en una niñata insufrible que espero que cambie, porque no quiero que un pain-in-the-ass me moleste a lo largo de los capítulos. Cómo, finalmente, Riggins ha aceptado lo que siente y luchará por ello. Y desgraciadamente, el eslabón perdido de Matt Saracen no encuentra la recompensa por todos los sacrificios que hace día a día (en serio, ¿por qué maltratan tanto a este personaje?).

7. Anatomía de Grey o "el regreso de la sombra de Burke". Hasta que no ha ocurrido, nunca me he dado cuenta de que ansiaba el momento en que Christina Yang explotara y hablara sobre lo que pasó con Preston Burke. Gracias a Hunt y sus esfuerzos por quererla, hemos tenido, en los últimos capítulos, raciones dolorosas de aplastante sinceridad por parte de Yang. Siempre me ha gustado su personaje por su acidez y bordería, pero cuando está involucrada en relaciones sentimentales se hace grande. Y los guionistas nos deleitan con momentos como el penúltimo capítulo en el que Christina describe cómo le robaron pequeños trozos de ella hasta deshacerla. Yang Power.

8. Dexter, Californication, Damages, Desperate Housewives, In Treatment, Pushing Daisies, 30 Rock. Estos son los pesos pesados que tengo pendientes. Dos temporadas de Dexter. Dos temporadas de Californication. Una de Damages y media de Desperate Housewives. Todos los 44 capítulos de la segunda de In Treatment. Y lamentablemente, la última temporada de la cancelada Pushing Daisies. Dos temporadas enteras de 30 Rock. Los tengo ahí. Presentes. Planeando al fondo de mi cabeza. Reprochándome mi falta de atención. Reprochándome que, en vez de ponerme con ellas, me distraigo con otras nuevas. Friday Night Lights, Cougar Town, Entourage, Frasier, Bones, Skins, Carnivale, Modern Family, Los Tudor. No lo puedo evitar. Tengo una lista interminable de temporadas pendientes y una lista interminable de series que debería ver. Quiero abarcar tanto en tan poco espacio, que me voy dejando las cosas por el camino. Pero llegará el momento... lo juro, llegará el momento en el que sienta que estoy al día con todo y que, finalmente, puedo disfrutar de las dos grandes joyas de la 3ra y 4ta temporada de Dexter y todo lo demás que me falta. No los pierdo de vista. No señor.

9. Caprica. Preludio de Battlestar Galactica. Todavía no la he visto. No sé si quiero hacerlo, aunque la forma de MrMacguffin de hablar sobre un personaje me ha despertado la intriga. No es que no me llame la atención. Pero me siento un poco ajena a la serie. BSG supuso para mi toda una revelación, y considerada como una de las mejores series que he tenido la ocasión de ver, no quiero crearme expectativas en base a algo que la única relación que pueden tener es una línea histórica. Quiero decir... no habrá Starbuck. No estarán los Adama. Ni Cavil para hablar sobre su cuerpo humano que tanto aborrece. No habrá nada de todo lo que implicó a los personajes, a la historia, y a la nave. Tengo el capítulo. Es sólo que no me atrevo a verlo.

10. Lost. Sólo tengo que decir una cosa en referencia al 3er capítulo: WHAT!?!??!?! Vale, sí. Se podía deducir a lo largo del capítulo. Pero esa última imagen... Impactante. Impaciente por el próximo capítulo.

11. Spider, de Patrick McGrath. Un libro opresivo, oscuro, temeroso. El reflejo de un hombre atormentado por su pasado. Un hombre resguardándose en diferentes compartimentos de su cabeza, elaborando así una telaraña que desarrolla todo lo que nos cuenta. El olor a gas. El ático. Los cigarrillos que fuma. El desarrollo de una personalidad esquizoide torturada por las voces y las mentiras. Un relato muy bien escrito y muy descriptivo que nos acerca al mundo de la locura de alguien a quien le arrebataron lo que más quería y le hirieron donde más dolía. Los últimos capítulos son realmente desgarradores... Y las descripciones que hace el protagonista de su propio cuerpo y estado impactan por la sinceridad con la que siente la muerte de su cárcel física y la inminente liberación de su alma.

12. Los Tudor. Primera temporada ya vista. El amigo Rhys Meyers interpretando a un endiablado y egoista Enrique VIII, rey de Inglaterra y follador nato, al que le interesa, por encima de todo, tener un descendiente varón. Lo que se ve en la primera temporada son las idas y venidas de un rey que se preocupa más por sí mismo que por el pueblo sobre el que gobierna. Los que le rodean susurran y conspiran. Otros le ayudan a conseguir sus metas. Y por suerte, Sam Neil no ha pasado de la primera temporada (doy gracias por que odiaba a su personaje y odiaba su interpretación). Bien ambientada. Con buenos guiones. Y una espléndida Natalie Dormer en su papel de Ana Bolena... No hay que desmerecer el trabajo de Meyers que, por regla general, está bien, pero en algunos momentos resulta un poco exagerado (quizás el rey era realmente así de exagerado... quién sabe). Quedan todavía dos temporadas más con las que disfrutar de los engaños y la tiranía de un rey egocéntrico a más no poder. Eso sí, hay series que me gustan más (mucho más). Pero creo que esta es una serie que merece la pena y con la que se puede aprender un poco de historia (igual que en Roma, la cual, evidentemente, está muy por encima de Los Tudor... Eso sí, hay que tener en cuenta que son dos canales de televisión totalmente diferentes y que unos sueltan más dinero que otros).

13. En Noviembre, cuando estuve en Londres con mi señora madre, hubo un momento de relax en la habitación del hotel en el que vi un anuncio de una serie inglesa por la tele. Misfits. Era nueva. Todavía tenían que empezar a emitirla. Me quedé con el nombre, y seguí mi vida. En Enero me pude hacer con la primera temporada de la serie que me vi en dos tardes (no os escandalicéis, que sólo son 6 capítulos). Original. Con personajes adorablemente mezquinos pero con ese fondo bueno que todos sabemos que tienen. Y partiendo de la premisa que no todo el mundo quiere superpoderes y menos unos jóvenes que en realidad sienten que no tienen nada que hacer con ellos. De la misma cadena que emite Skins, serie que destaca por sus jóvenes personajes y su trama (y de la que también dispongo de la primera temporada [son 4 de momento] y que veré antes o después), Misfits tira por un lado un tanto más cómicamente gamberro, bebiendo mucho del protagonismo de Nathan, un chico que va de gracioso por la vida, pero con mucho carisma, y dejando al resto de personajes que interfieran en la trama para crear una historia redonda que te hace pensar sobre el qué harías tú si de repente tuvieras poderes. ¿Salvarías el mundo, como en la mierda de Héroes (y en vez de eso, la cagarías una y otra vez) o dejarías de lado esos aires de grandeza que siempre tienen los americanos (se me olvida, tanto Misfits como Skins son series inglesas) e intentarías seguir como si nada hubiera pasado, como pasa con estos jóvenes ingleses? Altamente recomendable. Los seis capítulos pasan en un suspiro... y en realidad, aparte de The Big Bang Theory, hacía mucho que no me reía tanto con una serie (sí, estoy diciendo que How I Met Your Mother está perdiendo brillo... salvando al siempre enorme Barney Stinson).

14. Y como no me gustan los números impares, aquí un bonus track: Castle o Nathan Fillion encontrando su sitio. En el movimiento seriéfilo de la blogosfera, Nathan Fillion siempre ha destacado por su encanto y carisma, y también, por ser un serial-killer. Serie en la que aparecía, serie que se cancelaba. Incluso cuando tuvo un pequeño papel en Desperate Housewives se hablaba de la posibilidad de que esa también terminaran cancelándola, y que sería demasiada coincidencia que fuera durante su aparición (claro que lo decían desde el cariño). Hoy goza de una más que merecida plaza en una de las series más amenas y divertidas de la televisión americana. No es un producto como Mad Men ni mucho menos. No. Es la serie que nos gusta ver a todos para pasar un buen rato y disfrutar de una de las mejores relaciones paterno-filial desde Gilmore Girls... Pasarlo bien con un protagonista lleno de carisma (y que sabe que lo tiene), simpatía y buen fondo (en serio, no atisbo nada oscuro en él) que, aunque no llegue a los niveles de Reese y Crews (aysh aysh... snif), forma un buen dúo con Beckett. Y por supuesto, esa tensión sexual no resuelta que, antes o después (nos harán esperar 5 o más temporadas, como en Bones?), por supuesto, se resolverá. Chapó por otorgarle una 2da temporada y esperemos que, con las audiencias que está teniendo, también goce de una 3ra.

Ya está. No más. Bye, bye!

14/2/10

Curiosidades y cosas que se aprenden de Holanda. Vol. 2

Y seguimos con las pequeñas cosas de este país.

- Groene vingers. Traducción literal: Dedos verdes. Así llaman por aquí a la gente que sabe de jardines, plantas y flores. Mi tía está organizando un centro creativo para Kloosterhaar, con demás gente, y ha diseñado un panfleto que explica qué hay. Por supuesto, tienen la sección de vidrio emplomado, pero echándole un vistazo he visto eso de "Groene vingers". Y me ha hecho gracia. ¿No os parece curioso?

- Hay al lado de la casa de mis tíos un lago (artificial, dicho sea de paso. ¿Y por qué artificial? Pues porque ya se sabe de los holandeses que tienen la manía de sacar arena de donde sea para ir haciendo más grande el país. Quizás la arena que sacaron de aquí no sea específicamente para crear dos metros más de los Países Bajos, pero ahí está el lago) en el que habitan... pues no sé, pongamos unos cuatrocientos patos. Por las mañanas, cuando me levanto para ir a pasear con mi tía y los perros, los 400 patos están en pleno apogeo y arman tal escándalo que, todavía a casi dos km, se les oye. Imaginaos. Una mancha negra y ruiodosa en medio del agua.

- Mi madre jura y perjura que en sus tiempos de moza, en los duros inviernos que se pasaban por aquel entonces, cuando se congelaba el canal que cruza unos cuántos pueblos de la zona de Twente, la gente se ponía los patines para ir sobre hielo y salían al canal a dar unos cuantos patinazos. Había que tener cuidado, pero, con los barcos que atravesaban el canal, porque rompían el hielo. Yo no he visto nunca jamás gente cruzar el canal de esta zona, en sus patines cuando éste estaba congelado, pero si dice mi madre que pasaba en sus tiempos, debe ser verdad. Sí que he visto el canal congelado... como para no verlo, con estos -4º continuos en los que vive este país. Pero mola más cuando viene el técnico de turno a parar los coches porque se sube el puente y el barco tiene que pasar... y el hielo, entonces, se va rompiendo poco a poco, y se oye un crack...crack... crack. **

- ¿En qué gimnasio de España regalarían una mensualidad? No me imagino yo al Country Club de Santa Ponsa dejando usar durante un mes las instalaciones a un familiar de un miembro. De verdad que no. Es evidente que no es el mismo tipo de gimnasio, pero pocas veces se debe de ver en España que, por la cara, te dejen campar a tus anchas en un centro deportivo fitness. ¿Qué os dice eso, eh?

- Aquí las bicis se pueden dejar tranquilamente en la acera, que nadie las toca. No se ven las bicicletas encadenadas a las farolas con hasta tres candados (dos por rueda y uno por el cuerpo metálico) y sin el sillín, por si las moscas. La gente va con su bici a todos lados. Se para en la acera, saca la pata para apoyarla, y hacen lo que tienen que hacer. Como si es estar una hora en la peluquería. Si no, las meten en una especie de aparcabicis que consiste en únicamente estancar la rueda delantera de la bicicleta en sitios específicamente diseñados para ello. Vale, sí. Las bicis holandesas tienen un candado. Un minicandado, por así decirlo. Está propiamente integrado en la bici, en la rueda trasera. Es una pieza metálica que básicamente impide que la rueda... pues eso, ruede. Pero vamos, no hay ningún problema en levantar la bici del suelo y salir por patas. No me veo yo dejando una bici en alguna de las aceras de Barcelona con ese tipo de candado. No duraría ni dos minutos ahí. Es entrañable ver la confianza en la civilización de esta gente, ¿no os parece? Me gustaría comparar la denuncia de robos de bicicletas en toda Holanda y toda España, a ver cómo resulta la historia. En fin... Me encanta ir por las calles de los pueblos y ver bicis por doquier... Y ninguna atada a farolas, papeleras o semáforos.

- Según mi tía, en Holanda es típico cenar (ya sabéis, alrededor de las 7 de la tarde) en el salón, viendo la tele, los domingos. Yo, si os digo la verdad, es algo que he descubierto este año. A lo mejor ya lo sabía de antemano, pero como era joven y mi memoria todavía no había desarrollado sus magníficas habilidades, quizás no lo recuerde. No sé por qué, me ha recordado a un espisodio de los Simpson en el que compran unas mesas individuales para poder cenar delante de la tele. Eso sí...aquí realmente el único que estaba mirando la tele era mi tío, mientras daban los resultados de fútbol de la liga holandesa (he echado algún que otro vistazo y desde luego, parece que los holandeses no tienen ni puta idea de jugar al fútbol y que en realidad, todos se tendrían que dedicar al patinaje sobre hielo... y no me refiero a esas coreografías en parejas o individuales a los que nos tienen acostumbrados la TV2... no, me refiero a la peña que recorre largas distancias en una posición algo parecida a la del "caganer"...). Pero es... ¿gracioso? salir de la rutina de la mesa y la formalidad y sentarse cómodamente y comer totalmente a tu bola.

- En mi obsesión compulsiva de mirar cada casa del camino que recorramos en coche, me he dado cuenta de que, realmente, lo de tiffany y vidrio emplomado está mucho más extendido de lo que pensaba y muchos de los hogares tienen pequeños ventanales de vidrio emplomado que da gusto mirar, aunque sea solo furtivamente. Aquí no solo hay gente que se hace sus propios ventanales, sino que hay gente que le gusta pero que no tiene las habilidades para poder hacerlo, por lo que crea sus diseños y los manda a profesionales que se dedican a esto. Una de mis primas (ya casada, con sus tres hijos, sus dos perros y su casa) no tiene el tiempo ni las ganas para ponerse a hacer esto, pero hizo un diseño y se lo envió al profesional de turno. La verdad es que es un diseño bastante sencillo pero combina muy bien las formas geométricas y los colores, y queda genial en su casa. En uno de los pueblos en los que vive una de mis tías (bueno, mi otra tía), hay una Iglesia (como toca) con toda una vidriera que, a pesar del contenido religioso que a mí, ni me va, ni me viene, es impresionante. Y el tío que lo hizo vive simplemente a unos 20 metros. Tiene el taller al lado y tenía un par de creaciones colgadas en las que no sólo aplica lo que es tiffany, sino también vidrio-fusión. En España todo esto brilla por su ausencia. Quizás no lo de vidrio-fusión, que ahora se empieza a llevar (esos micro-iglúes en los que fundir las piezas de cristal!), pero lo que viene siendo tiffany y vidrio emplomado... En fin. Por suerte, mi señora madre, siempre efectiva en sus búsquedas cuando yo doy palos de ciega, ha encontrado una empresa valenciana que tiene todo lo que necesitaría para poder hacer mis cosillas en Mallorca, así que... hay esperanza para España, todavía. ¡¡¡Primero voy a revolucionar la Isla, y luego la Península!!!

Seguimos a -4º. Mañana emplomaré mi pequeño gran árbol. La gata se ha acostumbrado a dormir conmigo. El viernes tengo un mini-torneo de dobles de tenis. Y luego un cursillo de vidrio fusión. A ver si me entero de algo que, aunque mi holandés esté evolucionando, no doy para tanto.

Dag, mijn liefde hobbits!

** Vistas las noticias y informados de que el agua está bien congelada, la gente sí ha salido con sus patines y hacer un poco de deporte sobre hielo. ¡Pero no en el canal de la infancia de mi madre!
** El lago al lado de casa de mis tíos también está congelado. Y sí, los patos siguen haciendo escándalo igual.

PD: Me encanta el diseño que Google tiene estos días por los Juegos Olímpicos de Invierno de Vancouver. Simples, efectivos y muy elegantes.
PPD: Se me olvidaba. Bueno, mejor así. Que se me olvide. Que dicen por ahí que el amor se tendría que demostrar todos los días del año y no sólo hoy.

10/2/10

Come on, you son of a bitch!

Lo dije. Y Lost se merece algo más, pero la verdad es que no tengo ni tiempo ni ganas de ponerme a pensar para elaborar un post como a Jacob le gustaría. Así que voy a ir rápido con las impresiones de la season premiere de esta 6ta temporada en la que todo acabará y seguramente, muchas cosas no terminen resueltas (y si me tengo que quejar, me quejaré en su momento, que no quepa duda). Así que, aviso de antemano, para el que no haya visto todavía el inicio de la temporada final, que se ahorre el post porque aquí va a haber unos cuántos spoilers. Y si por el contrario, eres alguien que no quieres ver la serie (eh, Teresa... xD), siéntete libre de leer lo que viene a continuación para saber si tienes o no razón en cuanto impresiones desde la lejanía.

- WTF. Dos realidades alternativas. Una, en la que la bomba estalla y todo funciona. El 815 no se estrella, y todos y cada uno de los pasajeros con los que hemos estado creciendo a lo largo de cinco temporadas han dejado de evolucionar y siguen en el punto del que no deberían haber salido. Es decir, vidas miserables. Así fue como llegaron a la Isla pero mucho cambió a lo largo de ese tiempo en la Isla. Pero ahora John Locke sigue en la silla de ruedas. Kate sigue huyendo del Agente Federal. Claire volverá a parir. Etc, etc. Hugo en vez de estar maldito es el tío con mejor suerte del mundo. Y Jack... Jack vuelve a perder a su padre. Aunque sea una realidad paralela, inevitablemente hay ciertas conexiones que nos hacen ver que hay ciertas cosas que no cambian. Mucha gente se pregunta qué puñetas hacía Desmond en el avión. Tiene sentido. Si Widmore no sale de la Isla, no hay Penny. Si no hay Penny, no hay petición de matrimonio que cancelar. Por lo que tampoco hay Widmore retando a Desmond a que vaya a una "race around the world". Por lo que no tiene por qué entrenarse en un estadio y coincidir con Jack. De ahí a que no se reconozcan. De todas maneras, su presencia en el avión es más bien perturbadora. Porque luego desaparece y no se le vuelve a ver el pelo. Esto por un lado. Y por el otro, la bomba no ha estallado. Construyeron la escotilla. Se estrelló el avión y todo sigue tal y como lo habíamos conocido, solo que Anti-Jacob alias Humo Negro ha conseguido una forma de deshacerse de Jacob y quiere algo por encima de todo y todos: Volver a casa.

- WTF. ¿Qué coño pasó con la azafata? En temporadas anteriores ya habíamos visto que estaba con los de Linus (no voy a decir los Otros, porque hay tantos Otros Otros Otros que ya me mareo), pero ahora está en el Templo... supongo que con los Reales Otros. ¿Cómo puñetas llegó hasta allí? ¿Y por qué?

- WTF. ¿Dónde está el Desmond de la realidad en la que la bomba no explota?

- WTF. ¿Soy solo yo o todo el mundo se quedó con el hecho de que Kate atiende a Jack antes que a Sawyer después de la supuesta explosión?

- Importante. ¿Por qué cuando Sawyer alcanza a Juliet entre todo ese tinglado de metal, bicis, sillas y demás historias, ésta le espeta, lamentada, que no ha funcionado... y en cambio, cuando entierran su cuerpo y Sawyer le obliga a hablar con ella, Miles consigue oír un "It worked"? ¿Cómo sabe Juliet que ha funcionado? ¿O cómo sabe Miles que ha funcionado, si en realidad no hay forma de hablar con los muertos?

- ¿Dónde coño está Christian Sheppard? Tanto en una realidad como en la otra. ¿Y qué importancia real tiene en la trama?

- Impacta la conversación que tienen Jack y Locke en la realidad alternativa, en la que la bomba explota y el avión no se estrella.

En fin. Seguramente me olvide más cosas (supongo que ahora en el cuerpo de Sayid estará Jacob), pero de momento lo dejo aquí. Que dije que sería breve. A ver qué nos cuentan este miércoles. Y esperemos que el 23 de Mayo nos dejen otra vez con la boca abierta. Y como he leído por ahí de algún fan... la serie necesita un acto de fe por parte de los seguidores, así que por favor, no nos hagamos demasiadas expectativas y creamos que nosotros podríamos resolverlo todo mejor, que luego vienen las decepciones y realmente... son totalmente innecesarias.

8/2/10

Glas-in-lood

Antes de nada, quiero dejar aquí constancia de algo que me he encontrado por internet y que me ha impactado. Semejante creación merece un alto en este blog y... me gustaría, si tuviese los medios, llegar a este nivel de arte. Esto es un auténtico flipe.

Bien, después de esta magnificencia, me propongo explicar lo que es mi 3era creación con el vidrio emplomado... casi que motivo real por el que estoy aquí en los Países Bajos. Hay muchos patrones gratis por internet (he encontrado alguno interesante y chulo que haré para recompensar a alguien por una falta que cometí xD), pero hay diseños que me tiran para atrás. Mucho contenido religioso... o muchas flores. Hay algunos que están realmente chulos, y que intentaré hacer antes o después, pero por norma general me gustan otro tipo de cosas. Así que nada, estuve buscando durante no sé cuánto tiempo hasta dar no con un patrón, sino con algo ya hecho. Me gustó tanto que me guardé la imagen y, con un programa que tiene mi tía específico para diseñar los dibujos en los que basarse, digamos que calqué la imagen, lo hice un poco más grande, etc, etc. Esto es lo que salió:

¿Se ve lo que es? Un árbol, ¿no? En fin, lo que hacía falta ahora era buscar el vidrio. Mi tía tiene un arsenal de tipos de vidrio, pero no cuadraban demasiado con el diseño en el que me basaba... y la combinación de colores era tan buena e impactante que quería mantenerla. Como al día siguiente teníamos que ir a una tienda especializada en vidrio emplomado (la señora que lo lleva empezó con esto como hobby y acabó montando el negocio), miré en la web qué tipos de vidrio tenía y a ver si había algo parecido a lo que necesitaba. Lo había. Ahora sólo era necesario que los tuvieran realmente en la tienda. Bien... Pues en la tienda, finalmente, compré esto(qué ilu, mi primer vidrio comprado... já!!):




¿Qué os parece? Así que nada, más feliz que una perdiz yo con mi vidrio, hoy me he puesto a cortar lo que es el suelo y el árbol. Y esto es como va quedando el asunto:


Cuando acabe de cortar todas las piezas (las del cielo), lo que tendré que hacer será pulir todas y cada una de las piezas (algunas más que otras para terminen de encajar exactamente). Después, bordear todas las piezas con unas tiras de cobre que serán el conductor para el plomo. Y finalmente, emplomar. Y haremos todos juntos: "Oooooh!!"... o no. Quién sabe. Pero bueno, estoy bien segura de que este me lo voy a querer quedar. Así que nada, ya os informaré de cómo evoluciona el asunto y cómo es el resultado final.

Bye bye, my little hobbits.