17/1/07

Recuerdos

¿Cuánto puede decir una voz, con una melodía concreta, con una letra desgarradora, y dejándose el alma propia en la canción? Escucho "Delicate" de Damien Rice, en directo en The Union Chapel, y me dan ganas de llorar. Por un cúmulo de cosas. Por cosas que no tengo, que me faltan. Cosas que todavía no siento y que quiero sentir. Cosas que quiero alcanzar y que parece que me faltan las fuerzas para avanzar hacia ellas. Por un instante, me siento desgraciada. Quiero llorar. Quiero ir a mi rincón. Encerrarme durante momentos infinitos, hasta desahogarme. Ver que todo pasa, que no tiene por qué quedarse. Que se puede ir solo, y que después, volveré a empezar otra vez, pero esta vez con otra canción. Ver las cosas que sí tengo, y sentir las cosas que veo, toco, y pienso. Las cosas que estoy alcanzando poco a poco, empujada por una fuerza que a veces, me pregunto de dónde sale y porqué diablos no será más constante.

Con esto de buscar una bici y que mi tía me ayude, pienso en Holanda. Las diferentes épocas que he pasado ahí. Echo de menos a mi abuela. Me acuerdo de cuando era pequeña y pasaba una parte del verano en su casa, con mi hermano. Me acuerdo del olor. De la ventana grande del salón. De los cajones marrones en los que guardábamos la ropa. El color de esa casa. Me acuerdo de los vecinos y sus chocolatinas. Del lago que había cerca, con patos a los que a veces les tirábamos pan. Ese pequeño tunel que pasábamos en bici. Lo cerca que estaba (y está) la peluquería de mi tío. Me acuerdo de ella. Me acuerdo cuando nos mandaba a mi hermano y a mi a por leche. Cuando jugábamos con ella a las cartas. Las visitas de todos los tíos. Aquellos días que intentaba leer cuentos en holandés. A veces me gustaría volver atrás y estar una vez más en esa casa, con ella. Alguna vez llegué a pensar que era un ángel.

Me acuerdo de una parte de la historia que estaba escribiendo para Birth, sobre Blake y otros personajes. Iba a crear un personaje pensando en ella. Pero no me llegó a salir nada. No era capaz de sacar nada bueno. No sé por qué.

Pienso en los ventanales grandes de las casas de Holanda. Aquí no hay casas de ese tipo. En Mallorca, las únicas que son así, quizás, son las que se construyen para alemanes. Pero me gusta más pasear por los pueblos de Holanda. Coger la bici y llegar a cualquier parte. Ver las casas, tan calientes por dentro. La gente, tan hogareña. Todo es tan diferente.

Revivir los diferentes caminos que has tomado. Las direcciones que has escogido. Volver atrás, impregnarte de las vivencias que te enriquecieron. Entender ahora su significado. Sacar algo más de ello.

Cambiar de canción.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pues cambia de canción, ponte una que en vez de hacerte llorar y recordar tus carencias, pon una que te enseñe a valorar y recordar las cosas buenas que tienes.

Por ejemplo el nimogrante mix... para acordarte de mi xDDDDDD